Empieza un nuevo curso, un nuevo año, un nuevo abrir de casitas desde la máxima energía e ilusión.
Comienza a su vez una nueva estación, un respirar a bocanadas, con ganas de mirar hacia dentro y a su vez salvando una mano fuera.
Acogiendo.
Sosteniendo.
Cuidando.
Amando.

Pero también dando pie al recogernos y reencontrarnos.

Desde la máxima ilusión que alberga ese comienzo, ese abrupto y mágico inicio que recoge con su envoltura, hay algo en el interior que también pica. Que incluso se siente como un ardor, como un corazón que se deshilacha.

No es sorpresa ni novedad la situación de nuestra querida figura, que lleva por delante los intereses de los niños, y abandera el cuidado por excelencia acompañando los tres primeros años de la infancia. No es sorpresa, que los proyectos de mypdd estén llevando a ser insostenibles.
Este año sois muchas las compañeras que habéis tenido que cerrar proyectos y desde aquí os mandamos a todas el mejor de nuestros deseos, ya que aunque no sigamos en el camino, hay un pedazo de cada una de vosotras en nuestras fuerzas, energía y amor.

La red somos nosotras, somos todas, y más que nunca necesitamos estar juntas.
Cuidando y siendo cuidadas.
Escuchadas.
Enredadas.

Abriendo camino juntas, para transitar la vida junto a la infancia de la mano.

Deja una Respuesta

Acepto la política de privacidad *